domingo, marzo 19, 2006

Mutantópolis, por Rodrigo Alonso

Arte al Día, Marzo de 2006
La exposición del cordobés Pablo Peisino en Elsi del Rio fue pensada como un universo.




Seres mutantes y acumulación de huesos componen su geografía, inspirada en los relatos de ficción del americano Philip Dick. Los primeros se despliegan en dibujos muy libres, casi infantiles, donde predomina una línea errática y juguetona. Lápices y crayones sobre papeles de colores son el soporte principal para las figuras mutantes, que poseen generalmente un rol protagónico frente a un entorno apenas esbozado.

Las pequeñas dimensiones de las obras les otorgan un aire de intimidad, su disposición rítmica sobre las paredes denotan una cualidad lúdica.

Los huesos se apilan en el piso o se agolpan dentro de pequeños marcos-cajas. Son esculturas blandas de aspecto evidentemente artesanal, a veces bordadas con canutillos. Otras formas igualmente blandas los acompañan desde las paredes, apuntalando el circuito conceptual que constituye el marco necesario para apreciar el conjunto de la exposición.