Fernanda Cohen en Revista NOTICIAS

Personajes Fernanda Cohen (29)
“Mi trabajo es jugado, diferente, burbujeante”
Artista plástica argentina, vive en Nueva York y sus ilustraciones aparecen en remeras de Gap, en “The New York Times”, Sony y MTV.
Por Vicky Guazzone di Passalacqua

Alcanzan apenas unas preguntas para darse cuenta de que lo suyo es la eficacia. Directa, concisa y sumamente clara, Fernanda Cohen contesta sin dilaciones. Conforme va respondiendo, estos detalles comienzan a hablar por sí solos. Y es fácil deducir que en esa eficiencia y soltura radica una de las claves del éxito de esta artista argentina de 29 años, casada, sin hijos, residente en Nueva York y cuyas ilustraciones están al servicio de empresas como Gap, Sony, “The New York Times”, y Keds.

Noticias: En diciembre salieron a la venta sus remeras ilustradas para Gap. ¿Cómo fue el proceso?
Fernanda Cohen: Fue tan liviano que casi no me di cuenta. Pensé que iban a volverme loca con sus pedidos y sus entregas, como sucede en muchas de las corporaciones grandes, pero nada que ver. Me dirigieron muy poco y me dieron mucha más libertad de la que esperaba.

La carrera de Fernanda está plagada de sucesos como este. Desde que a los 20 años ingresó a la School of Visual Arts de Nueva York y se radicó en esa ciudad, su cartera de clientes no ha hecho más que aumentar. “Al graduarme ya tenía trabajo, porque había llamado a `The New York Times´ y le había pedido una oportunidad a Steve Heller, reconocido director de arte”, relata Cohen. A una semana de egresar, veía su primer dibujo publicado en el diario. Le siguieron participaciones en revistas como “Dwell” y “Harvard Business Review”, y posteriormente llegó el llamado de Ikram, una boutique de alta costura conocida por contar entre sus clientas más fieles a Michelle Obama. “La diseñadora me llamó para ilustrarle 12 postales mensuales para su campaña del 2005. Jamás había hecho moda, pero igual me animé”, cuenta Fernanda. Aquel trabajo derivó en dos años de campañas, invitaciones y vidrieras, donde los sucesos más recientes son el diseño de unas zapatillas exclusivas para la marca americana Keds y los murales que está pintando para el restaurante neoyorquino Beba, en el SoHo.

Noticias: ¿Hubo un efecto dominó, un cliente atrajo al otro?
Cohen: Así fue. Una vez que hice dos campañas para Ikram me entró laburo dentro del mismo rubro de mujeres femeninas y glamorosas, y empecé a dibujar para “Target”, MTV, “Cosmopolitan” y Flaunt. Y lo mismo me pasó cuando hice la primera tapa de la revista del “The New York Times”, un año después de mi primer dibujo, y me llamaron de revistas de negocios como “Money” y “Time”.

Noticias: También realizó vidrieras para The New York Look, ¿cómo fue eso?
Cohen: Surgieron gracias a un viejo amigo, Marcelo Ríos, quien a fines del 2001 y en plena crisis argentina me preguntó si me interesaba traer ropa de diseñadores a New York. Yo todavía era estudiante, y dije que sí, ¿qué podía perder? Me dio ropa de Vero Ivaldi, Mariana Dappiano y algunos más y fui de local en local a venderla, con la cara más dura que una piedra. Así conocí a Saeed, el dueño de The New York Look, que enseguida me adoptó como una hija y me compró U$S 10.000 de mercadería. Y cuando el caos argentino hizo que dejaran de llegarme los productos, empecé a trabajar yo misma con él, ilustrando sus vidrieras. Y la primera fue en 5ta Avenida y 45th Street, ¡una super-ubicación!

Noticias: ¿Qué es lo especial de su estilo que gusta tanto?
Cohen: Sólo puedo repetir lo que me dicen, porque estoy tan inmersa que me cuesta verme objetivamente, pero me cuentan que mi trabajo es diferente, jugado, femenino, burbujeante. Con mucho movimiento y lleno de vida. Ser diferente es una gran ventaja, pero al principio había muchos clientes que no sabían qué hacer conmigo…

Noticias: ¿Qué tan crítica es con su trabajo?
Cohen: ¡Muchísimo! Soy supercrítica y poco sensible al respecto. La crítica constructiva me alimenta, y es lo que formó mi trabajo inicialmente. Mi marido, David, mi mamá y mi abuela son las personas a las que más recurro en los primeros bocetos.

Noticias: ¿Cuáles son sus próximos proyectos?
Cohen: En Buenos Aires voy a hacer otra exhibición individual en la galería de arte “Elsi del Río”, desde el 3 mayo al 3 de julio de este año y estaré presente en ArteBA. Mientras tanto, además, ilustro una columna semanal para “Clarín”, me ofrecieron ser artista residente en SCAD (Savannah College of Arts and Design), escribo una sección mensual para la revista “90+10” y doy conferencias por diferentes partes del mundo.

Noticias: ¿Y con todo eso entre manos tiene tiempo para hacer su propio arte, lejos de lo comercial?
Cohen: Sí. Desarrollo una serie de trabajos personales todos los años, por más trabajo comercial que tenga en mi estudio, y se exhibe en galerías. Por lo general son obras inspiradas en pequeñas obsesiones y fascinaciones que guían mi existencia. Me atraen los temas universales, como la sexualidad de la mujer, las mascotas y sus dueños, las discusiones, la risa.

Noticias: Diseñó las vidrieras porteñas de Jazmín Chebar y Martín Churba, ¿cree que hubiera logrado algo así si no se hubiera ido?
Cohen: La verdad, no tengo idea. Probablemente mi carrera hubiese sido diferente, más local, y quizás hubiera logrado oportunidades como la de Jazmín y Martín. Fueron cosas que adoré hacer, tanto desde lo comercial como desde lo personal, porque el alma de patriota me brota por los poros, y más a medida que pasa el tiempo.

Noticias: ¿Cómo es eso?
Cohen: Yo no me fui para buscar oportunidades, lo hice porque era chica y no tenía la noción que hoy tengo de lo que significa mudarse lejos de tu infancia, tu país, amigos y familia. Creo que una vez que te vas estás roto para siempre, y hay una parte mía que siempre va a estar en Buenos Aires. Y si bien me duele el corazón cuando lo pienso, ante todo me siento muy afortunada de poder hacer todo lo que me gusta y poder volver a mi país cuantas veces quiera.

Noticias: Y además de los viajes, ¿con qué se recompensa?
Cohen: Aunque suene triste, ¡en mi tiempo libre también me gusta trabajar! Me divierte y me llena de vida. También hago ejercicio, visito a mi sobrino en Los Ángeles, salgo a comer afuera y al cine con David. Me gusta gastar en ropa de diseñadores, como Marc Jacobs o Tramando. Y también nos gusta instalarnos en algún hotel de Manhattan por un fin de semana y jugarla de turistas.

Revista NOTICIAS
Sábado 10 de Abril de 2010
Número 1737