lunes, marzo 19, 2007

Opening de Subterránea, por Leandro Edelstein
















Volvió a llegar al límite. A punto estuvo de discutir, una vez más, si aquello era arte. O, mejor dicho, ¿qué es el arte? Pero se detuvo a tiempo. Fue suficientemente hábil como para poner un freno y canalizar esa energía en interpretar la obra.

Jueves, quince de marzo de dosmilsiete. Marga Steinwasser se expone en Elsi del Rio, Arte Contemporáneo. Arévalo 1748, Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Lo inusual, la botánica como medio, dice. El verde vegetal vive sobre el blanco revoque. El lápiz es una extensión del vivo. La pared es parte de la obra. Los limites poco claros. Todo esto es el cómo. La raíz el qué.

“Es el órgano que permite fijarse al suelo y, a la vez, extraer las sustancias nutritivas del mismo…”, leyó, gustó y memorizó. Comento, copa de por medio, lo vital del las raíces. Debatió menos de lo que pudo haber. Pensó. La raíz es el pasado, el presente y el futuro. La raíz es el inicio, el problema y la solución. Es la simpleza y la complejidad.

La gente se juntó en la vereda, aprovechando la ausencia repentina pero dichosa del garúe finito. Fotos. Obra. Expresión. La artista que convoca reparte explicaciones ensonrisada de felicidad y su gente la acompaña en Subterránea. De una canasta brotan artesanales kits caseros de germinación que proveen de un pequeño recipiente con papel secante, variedad de semillas e instrucciones. Efectivo y didáctico.

No sabe porqué pero le gustó. Siente que necesita una explicación y no tardó en encontrarla. Sin embargo le gustó esa primera impresión. Esa no tuvo un porqué.

Veintidós horas en Palermo. Elsi del Río, espacio de arte, baja sus persianas. Unos y otros parten. Solos o en multitud. Algunos se juntan. La raíz se la llevan todos.
Leandro Edelstein
Buenos Aires, 19 de Marzo de 2007