Opening de Sana, Sana
¿A dónde vamos cuando soñamos?
La artista plantea que existe allí un espacio sensorial que se manifiesta en nuestras emociones.
Renata Morini comienza esta nueva serie "Sana, sana..." planteándonos como visual de fondo el telón blanco, espacio que reserva para su alma en trance. Allí comienzan a dibujarse pedacitos de su alma engamadas con una noción cierta de equilibrio y en una combinación abstracta del retrato de su inconsciente.
Todos sabemos que el acto curativo de la inspiración necesita de la ilusión. Los sueños en el profundo trance poético llegan a convertirse en convicciones. Esta claro que para este viaje la artista toma de la mano a su hijo Pedro, imagen inmaculada, sencilla y lúdica. El solo hecho de que brote una emoción en un trazo simple para Renata Morini significa Arte. La valija y la cruz son su santuario recuperado."Donde habitan mis mundos, mis amores, mis desencuentros, mis dolores".
Creo profundamente que ella piensa que no hay una institución de la emoción sino un fluir sagrado, eso cura.
Daniel Aráoz
La artista plantea que existe allí un espacio sensorial que se manifiesta en nuestras emociones.
Renata Morini comienza esta nueva serie "Sana, sana..." planteándonos como visual de fondo el telón blanco, espacio que reserva para su alma en trance. Allí comienzan a dibujarse pedacitos de su alma engamadas con una noción cierta de equilibrio y en una combinación abstracta del retrato de su inconsciente.
Todos sabemos que el acto curativo de la inspiración necesita de la ilusión. Los sueños en el profundo trance poético llegan a convertirse en convicciones. Esta claro que para este viaje la artista toma de la mano a su hijo Pedro, imagen inmaculada, sencilla y lúdica. El solo hecho de que brote una emoción en un trazo simple para Renata Morini significa Arte. La valija y la cruz son su santuario recuperado."Donde habitan mis mundos, mis amores, mis desencuentros, mis dolores".
Creo profundamente que ella piensa que no hay una institución de la emoción sino un fluir sagrado, eso cura.
Daniel Aráoz
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